El cerebro y las emociones

¿cuál es la relación entre el cerebro y las emociones?

Neider Ruiz Gaviria

5/17/20232 min read

El cerebro del ser humano es el órgano que organiza, gestiona, trata de mantener el equilibrio e incluso tiene la capacidad de autogestionarse, esto último lo diferencia de los demás mamíferos. Es capaz de realizar decenas de funciones en un minuto. Está compuesto por aproximadamente 100.000 millones de neuronas, que forman una gran red de intercomunicación entre ellas (sinapsis). Esta red tiene un potencial casi infinito, y sus conexiones son mayores que todas las estrellas del universo juntas.

El cerebro es el centro de mando de todo el organismo, todo el cuerpo recibe constantemente "órdenes" desde él; aunque la mayor parte del tiempo no nos demos cuenta de esto, ya que es un sistema tan bien diseñado que no necesitamos estar conscientes para que esto suceda. Esta es la razón por la cual perdemos la dimensión exacta de su potencial, capacidad de adaptación y mejoramiento continuo.

Para identificar y comprender nuestras emociones, podemos practicar la autoobservación, el auto diálogo y el diálogo con otras personas. La autoobservación implica prestar atención a nuestros pensamientos, sentimientos y reacciones a las experiencias diarias. El auto diálogo implica hablar consigo mismo para explorar los estados emocionales y reflexionar sobre las vivencias; y el diálogo con otras personas es el proceso, mediante conversaciones con un amigo o terapeuta, acerca de las emociones o sentimientos, para comenzar a gestionarlas y reconocerlas.

Es claro que el intelecto y las emociones no pueden estar completamente separadas. Al principio, un estímulo desencadena una emoción, esta comienza en el cerebro, pero se siente en el cuerpo. Esta proyección de emociones y el objeto que la ha causado, se convierte en un sentimiento, lo que a su vez guían los comportamientos y acciones racionales, con el fin de tomar decisiones acertadas.

La identificación de las emociones puede ser útil para comprender mejor nuestro estado emocional y tomar decisiones más saludables, tanto para gestionar la ansiedad como el dolor crónico. Algunas formas de identificar las emociones incluyen prestar atención a los patrones de los pensamientos; hablar sobre los sentimientos con alguien de confianza y tomar nota de la respuesta física ante situaciones estresantes. Practicando la auto-observación y la meditación, podemos aprender a identificar mejor las emociones.